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Una vez más, anclado en el presente
Y lanzando mis miradas al futuro,
Vuelvo, en soledad, a elevar mis manos
Hacia Ti, a quien me acojo,
A quien solemnemente he dedicado
Altares en el corazón,
en lo más hondo
De él, para que en todo tiempo
Tu voz vuelva a llamarme.
Sobre ellos arde,
Profundamente inscrita, esta palabra
AL DIOS DESCONOCIDO.
Soy tuyo, aunque el mal, hasta este momento
Haya venido atenazando mi espíritu;
Soy tuyo... y los lazos percibo
Que en lucha tiran de mí hacia arriba,
Y, aunque quisiera huir,
Me fuerzan a servirte.
¡Quiero conocerte, desconocido!
Que tocas en lo profundo de mi alma,
Que cual tormenta recorres mi vida.
Inconcebible,
Tu afín a mí;
Quiero conocerte y...
Siempre servirte.
Siempre supe que don Federico andaba buscando algo o más bien, a Alguien; pero probablemente, no lo encontró. Nadie fue capaz de mostrarle a Dios, para él, desconocido. En nuestra sociedad, andan muchos, buscando; pero pocos están dispuestos a mostrarles el camino y a recorrerlo con ellos.
Hoy fue un pensamiento y no un chiste, mañana, más chistes...
Reflexiones sobre una nueva constitución para Chile, por Javier Edwards
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*Recibí este texto por whatsapp. Copio lo que recibí. Supongo que será de
Javier; pero no estoy segura, ni tengo cómo comunicarme con él para
preguntarle....
Hace 4 años.
2 comentarios:
En algún momento supe más sobre Nietzsche pero creo que ya lo olvidé casi todo. Eso sí siempre lo encontré demasiado complejo. Me habría gustado entender lo que escribió mejor.
también a mí! un abrazo!
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